Ante los problemas... "buscando soluciones"

Hoy se cumple un aniversario terrible: 10 años del ataque a las torres gemelas de Nueva York y al Pentágono. Aquel atentado terrorista ha sido, y sigue siéndo, un símbolo de que algo no funciona bien en nuestro mundo. No estamos construyendo la sociedad en la que vivimos sobre cimientos seguros de justicia, de paz, de solidaridad, de amor, de dignidad, de libertad, de esperanza, de alegría, de ternura, de respeto, de cariño, de amistad, de equilibrio ecológico, de... (pon aquí el valor positivo que quieras añadir).

En cambio, continuamente seguimos oyendo o padeciendo, a nuestro alrededor, noticias sobre crisis, paro, violencia, odio, venganza, injusticia, guerra, destrucción, hambre, pobreza, desesperación, muerte,... ¿Hay solución para este mundo?

Hace tiempo que hice mío el famoso adagio que afirma que "si quieres cambiar el mundo, empieza por cambiarte a ti mismo". Si cada uno de nosotros cambiara su corazón de piedra por un corazón de carne, haríamos posibles unas relaciones más fraternas y humanas entre nosotros y en nuetro entorno, desterrando todas aquellas situaciones que nos apartan de lo que todos buscamos con ansia: la felicidad.

Y ¿qué necesito para cambiar mi corazón? A esto puede responder el vídeo que pongo a continuación. Lo he encontrado en el portal "Quiero ver" y me parece que la solución que aporta es algo imprescindible y que todos necesitamos. ¿Qué es ello? La solución... al final del vídeo.

Pista para ir meditando: tiene que ver con entender el sentido profundo del sacramento del que hablabamos en el post anterior.